Es esta la segunda exposición individual de Zubiaga en Galería Vanguardia. Si bien en la primera nos transmitía la trepidante actividad de la ciudad de Nueva York en esta el fotógrafo nos transporta a las enormes extensiones del desierto de Namibia, sus animales, sus oasis, e incluso la magnificencia de su poder apoderándose de construcciones abandonadas como en la serie «Ghost City».
Viajero incansable, Zubiaga ya nos mostró en anteriores series el tipo de vida y los habitantes de estos impresionantes paisajes, pero en esta ocasión lo que nos quiere transmitir a través de sus imágenes son las sensaciones vividas en estos espacios. Como el mismo nos dice pretende ser el testimonio veraz de un instante.
«Captar esa pequeña fracción de tiempo que el ojo humano no puede descomponer en movimiento Y una vez atrapados esos fragmentos de mundos reales e imaginarios, multiplicarlos sin perder la realidad, dotándoles de una luz y una estética propia».